El exfutbolista de Atalanta se encuentra suspendido por dar positivo de terbutalina, luego de ingerir un jarabe para la tos de su hijo. En ese sentido, el ex-San Lorenzo en el podcast De Visitante, declaró: “Cuando las cosas van bien están todos y cuando las cosas no están bien, no está nadie. Hay de todo. Cada uno hace lo que puede y reacciona a ciertas cosas como puede”.
Tras la Copa del Mundo, el Papu no volvió a integrar una citación al seleccionado (fue llamado en marzo de 2023, pero se bajó por lesión y luego lo suspendieron). Por su ausencia, fueron varios los rumores que trascendieron, aunque el volante Leandro Paredes desmintió rumores y confirmó: “No pasó nada”.
El actual jugador de Pádova Calcio de la Serie B de Italia cumplirá la suspensión en octubre de este año. En esa línea, se mostró descontento por el tiempo y lo comparó con otros castigos por ingerir otras sustancias: “Tomás cocaína o te fumás un porro y te dan seis meses. Yo por haberme tomado un jarabe para la tos de mi hijo me comí 2 años. ¿A quién le entra en la cabeza?”.
El mediapunta de 37 años también se refirió a como vivió la sanción al principio de la misma: “Los primeros meses fueron duros porque no entendía porqué me pasaba a mí, porqué justo en mi mejor momento. Era el más top de mi carrera después de haber ganando un Mundial. Nunca me había pasado algo así en mi carrera y decís: ‘¿Por qué?’. La vida a veces te da estos golpes y sorpresas”.
“Me la comí y acá estoy, peleándola. Sí tuve mucha bronca y mucho enojo. Me costó ver fútbol al principio. No podía ver un partido, apagaba la televisión. Para mí el fútbol había muerto y las redes sociales, nada. Me aislé y trabajé con un psicólogo. Era un bucle del que no podía salir. Trabajando, trabajando y trabajando pude liberarme”, reveló el Papu, acerca de cómo logró salir adelante luego del duro revés.
FUENTE: TyC Sports