La jornada nocturna del jueves en el Rolex Paris Masters comenzaba con un atractivo partido entre Jannik Sinner (2°) y Francisco Cerúndolo (21°), quienes buscaban debutar en los cuartos de final. El italiano quería extender su racha en indoor después de su consagración en Viena y un sólido primer paso en la capital francesa, venciendo a Zizou Bergs en dos actos. Por su parte, el argentino se quitó del camino al bosnio Damir Dzumhur y sacó adelante un duro compromiso ante el serbio Miomir Kecmanovic, consiguiendo la seguidilla de victorias que no se le daba desde Toronto. El historial reflejaba una pequeña ventaja a favor de Sinner, quien ganó tres de los cinco partidos que jugaron.
En el amanecer del partido se pudo apreciar un buen nivel de los protagonistas, quienes se desenvolvieron correctamente en el servicio y lograron resolver con sus herramientas. Ya en el cuarto juego, Cerúndolo perdió el balance y encadenó errores no forzados, dándole tres chances de quiebre a Sinner, quien supo aprovechar la situación con una derecha cruzada. Sin embargo, el italiano tampoco pudo hacer pie en su juego de servicio, cometió equivocaciones en los intercambios y sufrió una ruptura sorpresiva. De todos modos, el argentino volvió a mostrar su lado más vulnerable, lo que lo llevó a ceder nuevamente el saque.
Con más dudas que certezas, Francisco pudo equiparar el ritmo establecido por su adversario, forzándolo al error para recuperar el break. El número dos del mundo no parecía estar en plena forma, presentaba dificultades en sus desplazamientos y fallaba más de lo normal. A pesar de las dificultades, Sinner jugó con inteligencia, exhibiendo su categoría y consistencia, para robarse el primer set tras un 7-5.
La segunda manga arrancó mucho mejor para el tenista de San Candido, que se mostró sólido en su turno de servicio y subió la marcha en el siguiente juego para cosechar un quiebre rápido. Impecable en sus ejecuciones, Sinner no le dio opciones a Cerúndolo y se colocó 3-0 en el marcador. En el cuarto game, el argentino tuvo que lidiar con las demandas del número dos del mundo, esquivando dos bolas de break. Posteriormente, el italiano volvió a imponer su ritmo, apretando a Cerúndolo y capitalizando un nuevo quiebre. Con las cifras en su poder, Sinner cumplió con su propósito, desplegando su mejor tenis para sentenciar la victoria con parciales de 7-5, 6-1.
FUENTE: Canal Tenis